Mitología Griega: Atis

Atis es el amante de Cibeles, su sirviente eunuco y conductor de su carroza tirada por leones. Atis enloqueció a causa de Cibeles y se castró a sí mismo. Inicialmente, Atis era un semidiós de Frigia.
La historia del origen de Atis se encuentra en Agdistis, que inicialmente tenía atributos masculinos y femeninos. Los Dioses del Olimpo, temerosos de Agdistis, le cortaron su miembro masculino y lo tiraron creciendo en el sitio donde cayó, un almendro. Cuando los frutos del almendro maduraron, Nana, la hija del Dios-río Sangarios, cogió un fruto y lo colocó en su regazo. El fruto desapareció, y ella se quedó embarazada. A su debido tiempo nació Atis, al que abandonó en las faldas de una montaña. El niño fue criado por un carnero. Cuando Atis creció, su belleza con cabellos largos era divina y Agdistis transformado en Cibeles se enamoró de él. Pero los padres adoptivos de Atis lo enviaron a Pesino donde tenía que contraer matrimonio con la hija del rey. Justo cuando estaba comenzando la ceremonia nupcial, Agdistis convertido en Cibeles apareció en su poder transcendente y Atis enloqueció y se cortó los genitales. El que iba a ser el futuro suegro de Atis, el rey que estaba dando a su hija en matrimonio también se automutiló. Agdistis se arrepintió y se aseguró de que el cuerpo de Atis no se pudriera. Atis renació como un pino siempre verde