Los Changeling no conforman una raza particular; proceden más bien de un hábito, que abarca a distintos seres provenientes prácticamente de todas las mitologías.
Changeling no es un nombre genérico, sino que define a cualquier criatura sobrenatural que practique el acto macabro de la sustitución.
Los Changelings son sustitutos, impostores; frutos de cualquier criatura mitológica que se haya dejado a sus hijos en reemplazo de un niño/a humano.
Las razones de este intercambio son muchas y a menudo se contradicen entre sí.
Por un lado, tenemos la motivación puramente malévola, es decir, cuando un ser sobrenatural necesita un agente humano para criar a su prole. Por el otro lado, los Changelings representan una especie de pago o tributo por el rapto de un humano recién nacido.
Los seres mágicos están muy atentos a los signos de las estrellas y pueden apropiarse de un niño cuando sobre él brilla algún tipo de marca especial.
Este afecto puede llevar a las Hadas a intercambiar a sus propios retoños por algún bebé humano.
Como curiosidad, en la Edad Media, para evitar que las Hadas se llevaran a los bebés humanos, había que vestir a los bebés con la ropa al revés durante la noche o bien, acostarlos con los pies sobre la cabecera del lecho.
Otras tradiciones, mucho más siniestras, hablan de algunos métodos abominables para saber si un niño es humano o un Changeling.
Las leyendas sostienen que los Changelings como todas las criaturas feéricas, le temen al acero, razón por la cual se realizaban pequeños cortes o incisiones en la piel de los sospechosos y se esperaba la reacción, que bien podía ser la muerte en el caso de que efectivamente se tratara de un Changeling.
Aunque, generalmente, los bebés de Hada pueden reconocerse fácilmente. Éstas criaturas suelen tener un apetito desmesurado y una inteligencia muy desarrollada. Físicamente parecen niños normales, a excepción por tener los ojos un poco más separados de lo habitual. Conocen cuál es su origen y no pasa demasiado tiempo hasta que deciden cruzar la frontera y regresar a su mundo.
Según las leyendas, las Hadas tienen más predilección por los niños pelirrojos, a los que ven como lejanos descendientes de su propia estirpe.
En los mitos Celtas, el Changeling es llamado Plentyn Newyd, al principio adquiere las características físicas de la familia que lo cría, pero pronto comienza a mostrar su verdadera naturaleza, adquiriendo rasgos bastante monstruosos. Su comportamiento es muy violento y hasta llega a atacar a sus hermanos y padres dando terribles mordiscos. Para confirmar que se trata de un Changeling, hay que prepararle la comida en un horno alimentado con madera de roble, si el niño huye despavorido después de degustar el alimento, se considera una prueba irrefutable de que se trata de un Changeling.
Los niños hermosos y las madres primerizas son quienes están más expuestos al intercambio.
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