En los cuentos infantiles, una Hada Madrina es una Hada con poderes mágicos que actúa como un mentor o progenitor de alguien, en el papel en el que un actual padrino era esperado para jugar en muchas sociedades.
Las Hadas Madrinas eran poco frecuentes en los cuentos, pero se convirtieron en figuras familiares debido a la popularidad de los cuentos literarios de Madame d´ Aulnoy y el Preciosismo y Charles Perrault. Otros muchos escritores incluyen varios tipos de animales y el espíritu de una madre muerta. El Hada Madrina, realmente tiene sus raíces en las figuras de las Moiras; esto está especialmente claro en La Bella Durmiente, donde decretó su destino, y se asocia con el giro.
En los cuentos del Preciosismo y sucesores posteriores, el Hada Madrina actúa de una forma atípica de Hadas en la creencia folclore real; que están preocupadas por el carácter y el destino de sus protegidos humanos, mientras que las Hadas en el folclore tenían sus propios intereses.
Típicamente, el protegido de la Hada Madrina es un príncipe o princesa y el héroe de la historia, y el padrino usa su magia para ayudar. El ejemplo más conocido es probablemente el del Hada Madrina de Cenicienta, de Charles Perrault. Ocho Hadas Madrinas aparecen en La Bella Durmiente, de Charles Perrault y de los Hermanos Grimm, versión titulada Pequeña Briar-Rose, las trece llamadas Madrinas se llaman "Mujeres Sabias". La popularidad de las versiones de estos cuentos está siendo llevado ampliamente como un motivo de cuento de Hadas común.
En la variante de Cenicienta de los Hermanos Grimm, Aschenputtel, no es ayudada por su Hada Madrina, sino por su madre muerta. Una gran variedad de otras figuras también pueden tomar este lugar. Se la presenta como amable, gentil y dulce.
En las obras del Preciosismo Francés, las Hadas Madrinas actúan tanto como lo hicieron madrinas reales entre sus círculos sociales, ejerciendo sus beneficios para sus ahijados, pero esperando respeto a cambio.
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