Consejos para una buena meditación

1. Hazlo como una actividad diaria. Solo vas a pasar al siguiente nivel de meditación si le asignas un horario diario.

2. Empieza por la respiración ya que es lo más importante. Respira profundo baja el ritmo cardíaco, relaja los músculos, enfoca la mente (esto es una manera ideal para empezar la respiración). Y es importante respirar siempre por la nariz.

3. Haz estiramientos al principio. Estira los músculos y suelta los tendones permitiéndote estar más cómodo, además al estirar empieza el proceso de "concentración interior" haciendo que le prestemos más atención al cuerpo.

4. Hay que meditar con un objetivo. Los principiantes tienen que entender que la meditación es un proceso activo. El acto de enfocar tu mente hacia un objetivo es algo difícil, pero se tiene que estar dispuesto para conseguirlo.

5. Si notas como te vas crispando a medida que intentas relajarte, concéntrate en tu respiración hasta que pasen esos pensamientos.

6. Aunque la postura más cómoda para meditar sea sentado con las piernas cruzadas, los iniciados deben probar diferentes posturas para encontrar con la que posiblemente puedan estar más cómodos.

7. Siente las partes de tu cuerpo. Esto es un buen ejercicio para los principiantes, cuando hemos conseguido un estado de relajación bueno, hay que poner toda la atención en un pie y después lentamente ir subiendo por todo el cuerpo. Esto es un buen indicador de que has conseguido un estado de relajación superior.

8. Escoge un espacio específico para meditar. Pon velas u otra parafernalia para ayudarte a sentirte relajado.

9. Lee algunos libros sobre meditación, sobre todo con instrucciones para meditar.

10. Hay que comprometerse a largo plazo. La meditación es una actividad para toda la vida, hazlo lo mejor que puedas cada día.

11. Escucha música relajante.

12. Usar técnicas en tu vida cotidiana. Si alguna vez te pones nervioso/a por algún motivo concéntrate en tu respiración.

13. Que no te molesten. Con ruido nunca se llega a un estado de relajación.

14. Haz pequeños ajustes. Para un principiante un pequeño movimiento físico puede transformar la relajación en una experiencia frustrada. Hay que asegurarse de que la próxima vez que vayamos a meditar esté todo exactamente igual.

15. Usa una vela como punto. Meditar con los ojos cerrados puede ser muy difícil para un principiante. Enciende una vela y úsala como punto de concentración, tener un punto visual y relajante te facilitará el proceso.

16. No te estreses. Esto hará que aparezcan los nervios y dificulte la relajación.

17. Meditar con tu pareja puede tener beneficios y puede mejorar tu concentración.

18. Cuando termines sal poco a poco de ese estado de relajación.

19. Date cuenta cuando tus ganas de meditar vayan a menos. La meditación es un trabajo difícil y llegarás al punto en el que te vas a cansar o simplemente empezarás a olvidarte de meditar. En este momento es cuando necesitarás practicar más.

20. Una vez que hayas aprendido a meditar, puedes caer en un estado de meditación en muy pocos segundos, lo cual es algo muy útil.