Piedras Sol y Luna

PIEDRA SOL:
Es afín al elemento Fuego. Algunas deidades que han sido representadas con esta piedra han sido Ra, Apolo, Helio, Horus y Sunna.
Tiene afinidad con el signo zodiacal Leo y con los Chakras Primero y Tercero.

En la antigüedad debido a su color anaranjado se usó mucho en la magia.
En el Renacimiento, se usaba para atraer la energía del Sol en los rituales.
Actualmente, los libros de magia parecen haberse olvidado de ella, porque hay muy pocas fuentes de información. A su vez es una piedra muy difícil de conseguir por lo que si encuentras una, guárdala.
La Piedra Sol es protectora. También se usa para dar al cuerpo energía física en momentos de fatiga, tensión o enfermedad.
Aumenta la conciencia psíquica.
La piedra ayuda a nutrirte a ti mismo/a, aportándote luz y energía y permitiendo que tu verdadero yo brille con luz propia. Es una piedra alquímica que aporta una poderosa conexión con la luz y el poder regenerador del Sol.
Si colocamos una piedra Sol en un saquito con hierbas medicinales aumentaremos las propiedades de éstas.
Estimula los poderes autosanadores, regula el sistema nervioso y organiza y armoniza todos los órganos. Trata los dolores de garganta crónicos y alivia las úlceras de estómago. Limpia todos los Chakras y aporta luz y energía.

*Ritual para proteger el hogar:
Se necesita:
-Una vela blanca.
-Varias piedras Sol (como mínimo 5)

Coloca la vela en tu altar o en la entrada de tu casa y rodeala con las piedras Sol. Enciende la vela al menos durante 10 minutos al día todos los días para expandir energías protectoras por toda la casa. Cuando la vela blanca se consuma, cambiala por otra, y así sucesivamente.

PIEDRA LUNA:
Puede ser de color blanco frecuentemente, también amarillenta, crema, o con reflejos azulados.
Tiene afinidad con los signos Acuario, Leo, Piscis, Géminis y Sagitario. Y con los Chakras Segundo, Sexto y Séptimo.

Limpia la mente de fantasmas propios. Es ideal para calmar los nervios, serenar nuestros espíritus y nuestra mente. Ayuda a equilibrar emociones, además que evita que nos dejemos arrastrar por ellas y estados de ánimo negativos. Como la Luna, nos recuerda que todo forma parte de un ciclo de cambios.
Despierta la sensibilidad en personas insensibles.
Es una piedra relacionada con la energía y la sabiduría femenina. Equilibra las energías tanto masculinas como femeninas, ayudando a los hombres que desean en ponerse en contacto con su lado femenino. Equilibra la energía del hombre excesivamente rudo y de la mujer que es excesivamente agresiva. Ayuda a restablecer la armonía de cualquier situación y emoción. También se relaciona con la creatividad.
La piedra Luna activa la intuición. Fomenta el sueño lucido, especialmente en Luna Llena. También nos ayuda a escuchar con mayor profundidad y precisión nuestra voz interior y a los seres de luz.
Es muy útil para aquellas personas que realizan viajes astrales.
Activa la energía del Segundo, Sexto y Séptimo Chakra. Si combinamos esta piedra con otra piedra, objeto, fondo, base, etc. de color azul, potenciará su energía.
Si situamos una piedra Luna en la frente cuando estamos meditando, podemos inducir a experiencias espirituales.