Es más que un hospital, era un complejo militar, también había una prisión, incluso una sala de torturas. Alrededor de este lugar hay sin duda muchas historias dónde la muerte es la gran protagonista. El origen de este hospital se remonta al año 1.930, el objetivo que tenía este hospital era albergar a tropas británicas, pero con la llegada de los japoneses en el año 1.942 comenzaron a llevarse a cabo toda clase de torturas. Se atendían heridas de bala, amputaciones que en un principio eran para 1.200 pacientes, pero llegaron a tratar hasta 15.000 paciente. Hay mucha muerte, mucha tortura y muchas enfermedades. Los presos eran tratados como bestias, dormían desnudos en celdas.
En muchos casos, los presos llegaban a sufrir úlceras tropicales, que se presentaban en forma de llagas que se comían la carne poco a poco, y además, como los presos estaban invadidos de moscas, éstas plantaban las larvas en las heridas, provocando la aparición de gusanos que obligaban a los médicos a amputarles las extremidades afectadas.
Muchos recuerdan ese lugar como un lugar macabro, era un camino que llegaba a la Morgue, los presos podían ver como subían los cadáveres de sus compañeros, era como recordándoles que tarde o temprano sus cuerpos también irían por aquel camino de muerte. El lugar fue cerrado, pero fue a partir de 1.990 cuando comenzaron a hablar de los fenómenos paranormales que se había apoderado de aquel lugar.
Curiosos y testigos que han ido a aquel lugar afirman que haber escuchado ruidos de cadena, gritos y lamentos de quienes eran torturados en aquellas celdas. Una de las estancias que más aterroriza a quienes van es la sala de espera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario