Esta Constelación debe su nombre a la Mitología Griega. Como ocurre con otras Constelaciones, hay varias leyendas que explican el origen de su nombre. Para los antiguos griegos, esta Constelación estaba relacionada con el mito de Zeus y la Diosa Némesis. Némesis, para escapar de Zeus y conservar su virginidad se cambiaba su forma a la de distintos animales. Cuando se convirtió en una gansa, Zeus inmediatamente se transformó en un maravilloso cisne y se ganó el amor de Némesis. La Diosa quedó embarazada, puso el huevo luego lo abandonó tras enterarse del engaño. Afortunadamente, un campesino lo encontró y se lo entregó a Leda, la esposa de Tindareos, el rey de Esparta. De ese huevo salió Helena de Troya. Helena era tan hermosa que Leda la reclamó como su propia hija.
Otra leyenda cuenta que Zeus se enamoró de Leda. Para poseerla se convirtió en cisne y la visitó en su noche de bodas. Así nacieron Pólux y Cástor, que son las estrellas que se encuentran en la cabeza de los gemelos de la Constelación de Géminis.
Y hay otra leyenda que dice que cuando Cygnus, (el hijo de Poseidón), nació, tuvo problemas y lo abandonaron en una orilla para que muriese. Pero un cisne lo acogió y lo llevó volando en su interior, donde terminó siendo rey de Colonae. Cygnus participó en la defensa de Troya frente a los ataques de Aquiles. En una de estas luchas, Aquiles terminó con la vida de Cygnus. Poseidón recogió el cuerpo de su hijo y lo convirtió en cisne, reservándole un lugar en el firmamento.
Esta Constelación está situada en la franja galáctica de la Vía Láctea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario