Este poema trata sobre la clase de enamorados que nos gustaría ser. Porque jamás importa el resultado, lo único que vale es haber amado así.
Y en las horas más ruidosas de la razón,
Todavía existe un incesante susurro: Te amo;
Único consuelo y soliloquio del corazón.
Tú moldeas mi esperanza, vestida en mi interior;
Liderando todas mi palpitaciones, fluyendo en mi dolor.
Tú yaces en mis muchos pensamientos, como la luz,
Como la dulce luz del crepúsculo,
O la visión anticipada del verano rompiendo en el arroyo,
Nubles reflejadas en un lago.
Y mirando hacia el cielo que se arquea sobre ti,
Muy a menudo, bendigo al dios que me ha hecho amarte así.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminaroie; como se llama la canción 1 del reproductor :v
ResponderEliminar"Isara", de la banda Eluveitie.
Eliminar