sábado, 21 de junio de 2014

El amigo de la Bruja

Durante muchos siglos, en Europa el gato era considerado una criatura maligna, el amigo de las Brujas o el discípulo del Diablo. La persecución a la que fue sometido fue eficaz, tanto que alrededor del año 1.400 el gato estaba casi extinguido. La Iglesia tuvo parte de culpa en la "mala prensa" que se creó en torno a este animal, ya que ésta se puso en contra de sus vínculos paganos. En el Antiguo Egipto, la Antigua Roma y en la Escandinavia Pagana, el gato se asociaba a la fertilidad, al placer y a la buena fortuna.
A lo largo de los siglos, la fama del gato ha sufrido altos y bajos. Los antiguos egipcios fueron los primeros en domesticar a este animal como útil cazador de ratas, ya que los egipcios se dieron cuenta de que los gatos protegían sus graneros de los ratones y las ratas. Más tarde, los egipcios alabaron a Bastet, una figura en forma de gato que era la Diosa de la fertilidad. Los gatos eran venerados hasta tal punto que cuando morían eran momificados también. Tras la caída de Egipto se les consideraba signos de buen augurio.
Bastet
Pero aquellos buenos tiempos tuvieron su fin en Europa en la época de la Edad Media, como ya he comentado antes.
La Iglesia estaba en contra de cualquier culto pagano. Así, se inició una terrible persecución contra la Brujería. Miles de personas inocentes fueron acusadas de practicar la Brujería, torturadas hasta la confesión y ejecutadas. Los gatos eran considerados los consortes del Diablo y amigos de las Brujas y tuvieron el mismo trato brutal. No fue necesario instigar a la población a participar en la campaña; ya que muchas ancianas solitarias que tenían un gato como animal de compañía fueron ahogadas o quemadas junto a sus supuestos espíritus.
A lo largo de los siglos XVI y XVII los gatos fueron sometidos a horribles torturas. Como consecuencia, el gato casi llegó a desaparecer de Europa.
Hasta el final del siglo XVIII no cesó la caza de Brujas; fue entonces cuando el gato reanudó su papel de cazador de ratas. Por suerte, la única superstición que existe en nuestros días es la que relaciona los gatos negros con la mala suerte si se te cruza uno. Curiosamente, en el Reino Unido un gato negro es considerado, ahora, como un signo de buena suerte, mientras que en Norteamérica se piensa que trae mala suerte. Hoy en día, el gato negro sigue asociándose con Halloween y aún acompaña a las Brujas en los cuentos, pero afortunadamente, la imagen del gato ha experimentado una transformación agradable.
*Como dato curioso, la expresión "tener gatitos", tiene su origen en la Edad Media, cuando se pensaba que una mujer con dolores de parto estaba embrujada y tenía gatitos que le arañaban el interior de su útero.

Bueno, ya que hoy es 21 de Junio, quería felicitarles a todos y todas un buen día de Litha.

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