Sus colores varían desde el rojo pardusco, rojo sangre, rojo brillante a gris acero y negro hierro.
Es afín al signo zodiacal Escorpio, aunque también lo puede ser de Sagitario, Acuario y Virgo.
Y además puede ser afín al Elemento Fuego.
Algunas de sus cualidades son la Curación, el Asentamiento y la Adivinación.
Es afín al Primer Chakra.
Los Druidas usaban el Hematite para la adivinación y como amuleto. Como curiosidad, en la Edad Media se usaron mucho los aderezos de esta piedra como defensa contra el mal de ojo y las malas artes de la Hechicería. En épocas posteriores, esta piedra cayó al olvido; aunque los sanadores siempre supieron de sus propiedades tan maravillosas.
El Hematite es sobre todo limpiador de la sangre por excelencia, ayudando en todos los procesos de desintoxicación como puede ser por ejemplo el tabaco, el alcohol, las drogas, el envenenamiento o incluso tratamientos farmacológicos. Activa la circulación de la sangre y estimula la absorción de oxígeno. También ayuda a cortar hemorragias.
El Hematite además, estimula y acelera el crecimiento de las células; por eso también su gran utilidad en los procesos de cicatrización, inhibe cicatrices cuando son suavemente masajeadas con la piedra. También alivia las impurezas de la piel.
El Hematite estimula la absorción de hierro en la sangre y la formación de glóbulos rojos; por eso es muy buen complemento para las personas con anemia. También el Hematite alivia los calambres de las piernas, la ansiedad y el insomnio.
También se utiliza el Hematite para enfermedades del sistema digestivo y úlceras. El Hematite extrae el calor del cuerpo, por lo que es útil para bajar la fiebre. Es un buen descongestivo, se puede aplicar en gripes y resfriados.
El Hematite es una piedra con poderoso elemento Yang, equilibra los meridianos, resolviendo los desequilibrios. Absorbe las energías mentales dispersas, y estimula la concentración. Potencia la memoria y la imaginación. Es muy útil para estudiar y comprender en el ámbito de estudio sobre todo las Matemáticas.
El Hematite es también un gran protector. El Hematite nos ayuda a superar problemas y actuar con prudencia y energía; aportándonos paciencia y templanza. Desarrolla en nosotros la capacidad para escuchar a los demás. También es útil para aportarnos seguridad y confianza en la vida. Si colocamos esta piedra durante unos diez minutos diarios en el entrecejo, mientras estamos acostados y en estado de relajación, conseguiremos el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu.
También potencia la voluntad, el instinto de supervivencia e imparte confianza. Elimina nuestras limitaciones mentales.
Absorbe las energías impuras, de rabia y de bajas vibraciones, tanto en nosotros como en nuestro entorno. Impide que las energías negativas entren en el aura, devolviendo al cuerpo paz y armonía.
El Hematite es considerado el símbolo de lo oculto. Ayuda a arraigar la espiritualidad en la experiencia física.
Al Hematite se le atribuye capacidad para atraer la buena suerte y evitar accidentes graves.
No hay comentarios:
Publicar un comentario